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En un vídeo Jesús hablaba de su relación con más aburrimiento que si estuviera leyendo una sentencia en un caso de patentes de Botsuana. Desde hace varios meses la nuestra era una relación de virtuosísimo desapego: cada uno en su orilla, sin odiarnos, sin amarnos, ajenos. Ahora mismo la relación de Jesús y Marina está en modo Carrefour 24 horas. Pues la indignación de Marina era más fingida. Pero antes, Lucía, que estaba acojonada por si la dejaban la última y el suyo era el peor. Pues esa amenaza era una puta mierda comparada con la de Marina: “Yo también me lo voy a pasar muy bien”. “Yo pensaba que él estaba enamorado de mí y que magia por su parte había”, dijo Marina. “Yo no pienso en ella… “Lo de que tiene una amiga que le hace cosas en el pelo lo mismo se lo ha inventado, porque mi novio el problema que tiene es que siempre teme quedar por debajo mía, físicamente y en todos los aspectos“, reveló Marina, que lleva años sin hacer el amor ella arriba porque a Jesús le da miedo.